Los suelos ácidos provocan un menor aprovechamiento de los nutrientes por parte de las plantas y cultivos. Para corregir la acidez se utilizan habitualmente distintos productos comerciales existentes en el mercado elaborados a base de calizas.
En fincas de las zonas de costa gallegas se utilizaban conchas de moluscos y crustáceos para subir el pH del suelo. Por eso, la catedrática del departamento de Edafología y Química Agrícola de la USC y coordinadora de la unidad de gestión ambiental y forestal sostenible UXAFORES propuso en unas recientes jornadas organizadas por SEIAF en la Escuela Politécnica de Lugo la utilización de conchas de mejillón como enmienda agrícola.
Después de China, Galicia es la segunda productora mundial de mejillón, un residuo marino abundante que es rico en carbonato de calcio y, por tanto, con propiedades beneficiosas tanto para suelos agrícolas como forestales.
En las bateas distribuidas por todo el litoral gallego se producen 270.000 toneladas de mejillón al año y su procesado en la industria conservera genera unos residuos de cerca de 90.000 toneladas de conchas.
A veces estos residuos se acumulan en zonas poco acondicionadas, por lo que su valoración agrícola entraría dentro de las actuales estrategias de economía circular fomentas desde Europa.
Además del uso agroganadero, también tendría utilidades en parcelas de viñedo que están recibiendo sulfatos de cobre para el tratamiento de enfermedades fúngicas.
También se podría utilizar a nivel forestal, aunque los montes de Galicia tienen una elevada productividad, un factor limitante para algunas especies es la acidez del suelo y los altos niveles de aluminio.
Fuente: campogalego.es