Las intensas y continuas lluvias de los últimos meses han provocado un retraso en la campaña de ensilado. Al no poder realizarse un adecuado abonado de las praderas las consecuencias son menor cantidad y calidad de hierba. La mayoría de las explotaciones de Galicia se encuentran en esta situación al estar las tierras empapadas.
Según las previsiones el ensilado se puede retrasar casi un mes o quince días con referencia a un año habitual siempre y cuando el buen tiempo de esta semana se cumpla.
Consejos
En el mes de marzo suele realizarse el abonado de fincas, aunque en esta ocasión gran parte de los ganaderos no lo realizaron. Para aquellas praderas que la hierba esté próximo al corte se recomienda no abonar para no retrasar más su recogida. Y en el caso de las zonas que dispongan de hierba pequeña se deberá aportar fertilizantes que actúan con rapidez para ayudar a su recuperación. Es importante esperar a que se acceda bien a las fincas para no dejar rodadas.
Se pide extremar la precaución con los purines porque las precipitaciones han provocado una considerable acumulación en las explotaciones.
Deza
Las principales comarcas ganaderas van con retraso en las tareas de ensilado como ocurre en la del Deza. Desde la Cooperativa Cobideza apunta que al estar los terrenos demasiado encharcados no se ha podido abonar. En cuanto a las previsiones, calculan que la siembra se retrasará casi un mes. Hasta el final de mayo no creen que se pueda sembrar en Vila de Cruces y Silleda mientras que se solía hacer ya a finales de abril. Para las zonas más frías como Lalín y Rodeiro se optará por ciclos de 300 y 260 e incluso de 180.
Fuente: Campo Galego